Si eres profe en una escuela tradicional, estarás acostumbrado a ver cómo es un aula de infantil ordinaria. Lo más común es que, cuando entremos en una clase de infantil, seamos recibidos con una decoración caracterizada por elementos vistosos y llenos de color. Las paredes de estas aulas y su mobiliario, en general, están repletos de materiales y juguetes muy coloridos, de plástico e, incluso, a veces, amontonados.

En un aula Montessori, sin embargo, solo vas a encontrarte con unos pocos materiales, todos configurados a partir de elementos naturales, generalmente de madera, con colores muy planos y que, además, han sido cuidadosamente seleccionados. Por esta razón, no verás nunca materiales o juguetes amontonados o que no tengan un significado para estar ahí.

En las aulas Montessori existe un dicho: “hay un lugar para todo, y todo está en su lugar”. Cuando los padres o incluso otros profes visitan un aula Montessori, es curioso que a menudo utilizan el término «minimalista» para describirlas.

El sentido del minimalismo y de organización se extiende mucho más allá de las paredes del aula; ya que también es una parte esencial de la filosofía educativa de María Montessori.

Hoy voy a compartir contigo algunas ideas interesantes para que configures tu propio aula Montessori y te voy a dar algunos consejos para que sepas cómo implementar algunos aspectos de esta metodología en tu forma de enseñar.

¡Empezamos!

Configuración del Aula Montessori

Para empezar con esta tarea, voy a citarte una frase de María Montessori que dice lo siguiente:

«El niño que se concentra es inmensamente feliz» María Montessori, La Mente Absorbente

Como te comentaba anteriormente, las aulas Montessori son simples en cuanto a diseño, pero ricas en educación. El propósito principal de un aula Montessori es darle al niño la oportunidad de concentrarse en una tarea a la vez.

Por lo tanto, no vas a encontrar elementos estridentes, ni colores chillones, y mucho menos pantallas en un aula Montessori.

Los materiales Montessori suelen estar hechos de madera. La maestra es la encargada de colocar el material en estantes abiertos y en recipientes abiertos.

Además, todos los materiales están al alcance fácil de los niños.

(Esto es algo en lo que profundizo mucho en la guía práctica que hice, la puedes ver aquí)

El acceso fácil a estos materiales significa que nuestros niños van a poder trabajar con cualquier material en el aula; uno de los rasgos distintivos de la educación Montessori. Podríamos llegar a decir que, comparado con muchas aulas de infantil, un aula Montessori podría llegar a parecer incluso “anticuada”.

Para que veas que esto de anticuadas no es cierto, te animo a que eches un vistazo en Pinterest utilizando el término «Montessori Classroom”, ¡vas a alucinar!

Como ves en la imagen de arriba, en un aula Montessori tradicional encontrarás principalmente muebles de madera. Los estantes abiertos permiten a nuestros niños visualizar rápidamente y acceder fácilmente a cualquier material en el que les gustaría trabajar.

Áreas de Aprendizaje en el Aula

El aula Montessori tradicional se divide en cinco áreas de aprendizaje.

Un guía Montessori o maestra, agrupa los diferentes materiales de la misma área de aprendizaje en estantes contiguos. De esta manera, los niños van a poder encontrar fácilmente los materiales con los que les gustaría trabajar y progresar a su propio ritmo.

Las cinco áreas de un salón Montessori son:

• Vida Práctica
• Sensorial
• Matemáticas
• Lenguaje
• Cultural

Área 1: El área de Vida Práctica

El área de vida práctica está diseñada para ayudar al niño a desarrollar habilidades para su vida diaria. Realizando este tipo de actividades, los pequeños también desarrollan rasgos de carácter tan importantes como la confianza, el cuidado del medio ambiente o incluso la empatía.

En un área de vida práctica, nuestros niños podrían trabajar, por ejemplo, en jardinería, limpieza, lavado de muñecas o también costura (¡ojo con las agujas, por favor!). Este área es la favorita de los más pequeños.

Área 2: El área Sensorial

Las actividades de tipo sensorial incluyen cualquier cosa y/o actividad que un niño pueda hacer para estudiar y clasificar su entorno. La clasificación, la ordenación y la organización son las actividades clave en la parte sensorial del aula Montessori.

Por ejemplo, la torre rosa es una actividad sensorial muy conocida en el ambiente Montessori. Otras actividades sensoriales de este tipo, incluyen por ejemplo las botellas para oler y las tabletas táctiles.

Área 3: El área de Matemáticas

Un niño que estudia a través del método Montessori, suele comenzar con la identificación de números y el conteo. Posteriormente, se procede a introducir el sistema decimal, luego la geometría y, posteriormente, se le introducen conceptos matemáticos algo más complejos.

Los maestros o guías, introducimos materiales Montessori como la escalera de cuentas, las tarjetas de números de madera y el cubo trinomial, para ayudar al niño a descubrir el maravilloso mundo de las matemáticas.

Área 4: El área del Lenguaje

El área de lenguaje se centra en la lengua materna del niño, tocando aspectos como la fonética o la propia composición de las palabras. Con este fin, los maestros introducimos materiales Montessori como por ejemplo, el alfabeto móvil, las letras de papel de lija y los libros.

Posteriormente, el niño aprende a usar los símbolos gramaticales Montessori, una manera muy ingeniosa de cubrir este tema, que en ocasiones es complicado de abordar con los más pequeños.

Área 5: El área Cultural

El área cultural de un aula Montessori cubre una amplia variedad de temas. Desde geografía hasta zoología, ciencia, botánica y lengua extranjera. Podríamos decir, que el área de aprendizaje cultural Montessori, es como un cajón desastre.

Por lo tanto, muchos maestros rotan el área cultural en el aula, por lo menos, una vez al mes. El objetivo es introducir constantemente nuevo material.

Recuerda: La educación Montessori es dirigida por el propio Niño

Algo que debemos recordar siempre es el principio fundamental de la filosofía Montessori que nos dice que el entorno debe inspirar al niño el deseo natural de aprender.

Con esta finalidad, la educación Montessori es dirigida por el propio niño. Por lo tanto, después de diseñar y planificar nuestro aula, nuestro trabajo consiste en observar y permitir que sea el propio niño el que explore el área.

Dependerá exclusivamente de él, lo que quiera mostrar al profesor y, por consiguiente, lo que le gustaría aprender.

Por ejemplo, supón que creas un pequeño rincón Montessori en clase y tu alumno va directamente a la torre rosa (algo que por cierto, es bastante común en los niños más pequeños). Después de ayudarle y enseñarle cómo usar la torre, permítele que repita el proceso tantas veces como él quiera y desee.

Podrá construir la torre muchas más veces de lo necesario, o más bien, más veces de las que tú misma crees que es necesario.

El punto clave aquí es que el niño sienta que es importante repetir el proceso. Solo después de que, finalmente, deje de construir la torre, es cuando podemos valorar la opción de presentarle otro material sensorial.

Si te sumerges en este mundo, algo que sí o sí vas a ver, es que algunos niños avanzarán, de forma natural, más rápido que otros. María Montessori decía que no hay velocidad incorrecta o correcta en un aula Montessori. El niño siempre lidera el aprendizaje.

El niño siempre lidera el aprendizaje.

Cómo Crear una Decoración del aula Inspirada en Montessori:

Estos son los puntos, que bajo mi opinión, debes llevar a cabo para empezar a trababajar en la creación de un entorno Montessori en tu aula

• Configura las áreas de aprendizaje separadas por las diferentes materias.
• Elige muebles de madera (si puedes, preferiblemente de alta calidad) y tamaño infantil.
• Elige estantes abiertos y que estén al alcance fácil de los estudiantes.
• Mantén el espacio organizado y limpio.
• Rota los materiales del área cultural, por lo menos, una vez al mes.
• Limita tu decoración de pared a unos pocos carteles cuidadosamente seleccionados.
• Considera colocar en clase un tablero de corcho grande como una forma para mostrar una colección sus pequeñas obras de arte o sus proyectos.
• Evita los juguetes con pilas y, sobre todo, las pantallas.
• Elige materiales y juguetes de madera siempre que sea posible.
• Elige materiales imprimibles atractivos y realistas.
• Fomenta habilidades prácticas para la vida como limpiar y cuidar plantas.
• Si un niño no muestra interés en un material específico, retíralo e introdúcele algo diferente.
• Abastécete de tapetes Montessori y enseña a los niños cómo usarlos.

Mira la imagen de debajo: En esta habitación inspirada en Montessori, los materiales se mantienen en estantes abiertos y todos los muebles son de tamaño infantil. El desorden se reduce al mínimo.

Las aulas o clases Montessori están diseñadas para proporcionar un entorno de aprendizaje relajado y respetuoso. Todo en un aula Montessori está diseñado con la intención de beneficiar al niño. Al darles a tus estudiantes tareas pequeñas y manejables, inculcas la confianza.

Y además, al permitirles avanzar a su propio ritmo, les estás inculcando el amor por el aprendizaje. Al darles la capacidad de cuidar de su salón de clases, les inculcas independencia.

Y finalmente, al limitar ciertos materiales y quitar las pantallas, les ayudas a desarrollar un mayor tiempo de atención.

El diseño minimalista pero ordenado de las aulas escolares Montessori juega un papel importante en el desarrollo del niño. Cuando se presenta con demasiadas opciones, un niño puede sentirse abrumado. Cuando creas un ambiente relajado, el estudiante puede explorar el material sin sentirse apurado.

Un aula Montessori es mucho más que un aula. Un aula Montessori es el primer paso en un viaje hacia una experiencia educativa minimalista, amorosa y gratificante. Y, a su vez, es el primer paso para criar a un adulto increíble. Después de todo, un adulto que ama aprender puede lograr cualquier cosa.